Las cualidades particulares del sistema monetario digital han dificultado en cierta manera su regulación legal, con la intención de convertirlo en un sistema de transacciones confiable y seguro. Dejar de tener referencias materiales para las transacciones monetarias ha sido una característica de esta propuesta digital que está generando transformaciones económicas en todo el mundo.
Después de su primera aparición en 1998 de la mano del ingeniero japonés, Wei Dai, no fue sino hasta 10 años más tarde cuando un grupo de personas bajo el seudónimo «Satoshi Nakamoto» retomaron la propuesta y la perfeccionaron para diseñar el primer protocolo de código libre Bitcoin, que da nombre también a la primera criptomoneda conocida.
La finalidad del Bitcoin es emplear un sistema de intercambio de valor basado en una moneda electrónica, sin que exista intervención de los organismos estatales. Básicamente se trata de una moneda que no es perceptible por los sentidos humanos y que sirve para intercambiar bienes y servicios exclusivamente a través de canales electrónicos. Además propone un sistema monetario eficiente, confiable y de fácil intercambio que no permite generar inflación, pues la misma red se encarga de emitir Bitcoins de forma descentralizada, en función de la demanda real.
¿Cuál es la legalidad del Bitcoin en el mundo?
El estado legal del Bitcoin cambia sustancialmente de un país a otro. Algunas naciones han permitido explícitamente su uso o comercio como es el caso de Estados Unidos, Japón y Luxemburgo, pioneros en este arte. Sin embargo, incluso para estos tres países los marcos regulatorios han tenido claras diferencias, pues por ejemplo en Japón se han impuesto mayores controles y exigencias a la hora de permitir su uso, mientras que en Estados Unidos la experiencia ha sido más flexible. Por lo general, en la llegada de la moneda digital preocupa el posible impacto de su sistema en las monedas nacionales, su uso indebido e ilícito y las implicaciones de su uso para la tributación.
Otras jurisdicciones fluyen con la llegada de la criptomoneda y esperan que la experiencia en otros territorios y en el mercado local les indiquen los pasos a seguir para regular su uso. Tal es el caso de la Unión Europea el uso de las criptomonedas es legal y trabajan en la definición de sus regulaciones. Estos países han decidido conocer a este nuevo sistema a través de la experiencia antes de formular leyes y controles. De igual manera, en Rusia trabajan por un marco regulatorio basado en la protección de los ciudadanos y en la instalación de un sistema que permita que las personas y empresas trabajen legalmente con las criptomonedas.
Pocos países han llegado al extremos de declarar al bitcoin como ilegal, a pesar de que no sea recibido como una moneda de curso legal en la mayoría de los países. Solo Japón se atrevió a otorgarle esa categoría. Entre los países que declararon fuera de ley a la moneda digital se encuentran: el norte de África, incluído Egipto, Bolivia, Brasil, Ecuador, Arabia Saudita, Irán, Nepal, Pakistán,China, Taiwan, Indonesia, entre otros.
En América Latina, Venezuela es uno de los países que ha comenzado a incluir a la criptomoneda como parte de su sistema financiero. En su planteamiento el Petro, la criptomoneda venezolana, aspira a convivir con el Bolívar, con la intención de optimizar las finanzas nacionales. Por su parte, Brasil, Bolivia y Ecuador son los únicos países de la región con prohibición para el uso de las criptomonedas.
Fuentes consultadas