Las medidas tomadas desde 2015 por el gobierno de los Estados Unidos de América, desde la administración de Barack Obama, y actualmente a cargo de Donald Trump, en respuesta a la situación venezolana han modificado la esfera económica, comercial y financiera entre ambos países.
En agosto de 2019 la administración norteamericana suscribió una nueva Orden Ejecutiva contra el gobierno venezolano, signada con el número 13.884, en la que se precisa el alcance del bloqueo de activos del gobierno suramericano en territorio de los Estados Unidos de América.
En el instrumento legal se incluye como objeto de sanción al Estado y gobierno de Venezuela, las subdivisiones políticas (entidades federales y municipios), agencias, el Banco Central de Venezuela y Petróleos de Venezuela, así como, cualquier entidad en la que el gobierno venezolano tenga propiedad o un interés equivalente al 50%.
La licencia a Chevron
Todas estas sanciones han impuesto nuevas acciones económicas y comerciales entre ambos países, siendo una de las razones por las que la empresa petrolera estadounidense Chevron Corporation, con estratégicas operaciones en suelo venezolano, ha tenido que renovar en dos oportunidades su licencia para continuar operando desde enero de este año.
Por ello, recientemente el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos aprobó la renovación por tres meses de la licencia concedida a la referida multinacional americana a pesar de todo el debate surgido en torno a ella. Algunos funcionarios de la administración Trump se negaban a darle curso a la medida al alegar que la generación de recursos económicos tras la explotación de hidrocarburos, es una ventaja para mantener en pie al gobierno de Nicolás Maduro. Sin embargo, para la mayoría que decidió su aprobación, las operaciones de Chevron significan un activo en medio del conflicto y un apoyo al equipo humano que labora en sus instalaciones en Venezuela.
La licencia no autoriza transacciones relacionadas con envíos de diluyentes para la conversión del petróleo pesado, pero permite las operaciones de compañías de servicios, tales como, Halliburton, Schlumberger, Baker Hughes y Weatherford International durante los próximos tres meses. En la actualidad, Chevron es la única compañía americana de explotación y producción que mantiene actividades en Venezuela con carácter de socio luego de la puesta en marcha del esquema de participación de socios a través de empresas mixtas. Actualmente, Chevron tiene participación en las empresas mixtas Petropiar, Petroboscán y Petroindependencia.
