Tener que abandonar el país y todo lo conocido por sentirse amenazado es una situación limitante y que causa desequilibrios fuertes a los individuos e incluso a grupos familiares enteros. Las condiciones por las que se decide tomar una decisión de esta naturaleza suelen ser sumamente críticas y atentan en contra de la vida y la integridad personal.
En 1951 la Organización de Naciones Unidas (ONU) determinó que el estatus de refugiado ocurre cuando una persona, por temor justificado de ser perseguida por su raza, religión, nacionalidad, pertenencia a un grupo social u opinión política, se encuentra fuera del país de su nacionalidad y no puede, a causa de esa amenaza regresar al mencionado lugar.
La condición de refugiado ha sido adoptada por muchos seres humanos a lo largo de la historia. En vista de lo común que puede ser y de la necesidad de proteger a estas personas en cualquier lugar donde se encuentren, se creó en 1951 el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur). En ese momento una de las tareas a resolver por la institución era dar protección y atención a todos aquellos individuos que deseaban volver a su país de origen al finalizar la Segunda Guerra Mundial. A partir de allí Acnur se ha dedicado a ofrecer protección y asistencia a decenas de millones de refugiados en todo el mundo, brindando soluciones sostenibles frente a su situación de vulnerabilidad en muchos aspectos de la vida cotidiana tales como el derecho a la nacionalidad, a la vivienda, al acceso a la salud y educación, entre otros.
La categoría de refugiado se diferencia de la de migrante económico pues estos últimos deciden desplazarse en la búsqueda de mejores perspectivas económicas y sociales para ellos y sus familiares, mientras que los refugiados se ven obligados a movilizarse para salvar sus vidas y preservar la libertad. Una cualidad que distingue a los refugiados es que no obtienen ningún tipo de protección por parte de sus Estados y frecuentemente son objeto de persecución por las autoridades de sus países.
Según datos estadísticos de Acnur, se han desplazado a la fuerza 68,5 millones de personas en todo el planeta. 25,4 millones de estas personas se han convertido en refugiados y 3,1 millones solicitan asilo. Las cifras revelan que 57% de los refugiados provienen de tres países: Sudán del Sur, Afganistán y Siria. Se estima que 85% de las personas en condición de refugiados se desplazan a naciones en desarrollo.
Campaña #ConLosRefugiados
Apoyar la protección y seguridad de todos los seres humanos en el mundo es una tarea trascendental y que debe ocupar a todos las personas. Dejar todo atrás y huir del país de origen es una situación que deja huellas en quienes la experimentan. Desde Acnur se trabaja para que este tránsito sea más ligero y que cada día sean menos las personas que deban atravesar estas fuertes experiencias.
Como parte de esta labor incansable, se decidió recoger firmas para enviar un mensaje claro a los gobernantes y líderes mundiales, a fin de invitarlos a tomar acción con responsabilidad en este tema. #ConLosRefugiados es el nombre de esta campaña con la que se hace un llamado específico a garantizar que todos los niños refugiados tengan acceso a la educación, que sus familias puedan vivir en un lugar y ambiente seguro y que cada persona refugiada tenga acceso a un trabajo digno, así como a la formación para adquirir nuevas competencias y conocimientos.
Desde la Fundación Aldana hacemos el llamado para que todos responsablemente firmen este valioso documento y apoyamos la adopción del Pacto Mundial sobre Refugiados, un acuerdo que será discutido por los líderes mundiales para acordar una forma más justa del manejo de la crisis mundial de los refugiados.
